Recostado sobre el tramo más ancho del río Paraná, el partido de Ramallo, creado en 1873, recibe su nombre de un antiguo poblador de la zona, Don Bartolomé Ramallo. Como muchos de los pueblos de nuestra provincia, esta ciudad se encuentra estrechamente ligada a la historia de nuestro país, y como parte de este patrimonio podemos hacer mención a un episodio bélico transcurrido en el año 1851, en el cual el General Lucio Mansilla y sus tropas, atacaron a siete barcos brasileños que remontaban el río Paraná, desatándose una importante acción militar denominada Batalla del Paso del Tonelero.
Dentro de dicho partido, se encuentra también, el Castillo de Rafael Obligado, perteneciente al famoso escritor argentino.
Con el transcurso de los años y como parte del crecimiento de dicha localidad, el 25 de marzo de 1903 nació una de las instituciones más arraigadas en la comunidad ramallense:
El Hospital José María Gomendio, el cual constituye el efector de salud más importante del partido de Ramallo. Al año pasan por él miles de vecinos para recibir atención médica; y con virtudes, defectos, cosas por mejorar y muchas cosas positivas para valorar, el hospital de Ramallo llegó a los 114 años de existencia. Su creación comenzó a tomar forma en el año 1901 al ser electo como Intendente Municipal el Mayor Dalmiro Castex, quien trabajo de manera activa en el progreso de la ciudad. Podemos enumerar muchas obras durante su gestión, pero su gran preocupación era la falta de un centro de salud.
Cuenta la historia que en septiembre de 1900, un reconocido vecino llamado José María Gomendio, quien había amasado en la región una importante fortuna (dedicado a la explotación ganadera, en especial a la crianza de ovejas), se encontraba muy enfermo. Para suministrarle los últimos sacramentos fue convocado el Cura Leopoldo Paglieri, de la Parroquia San Francisco Javier. Al brindarle la extremaunción, el sacerdote le propuso a Gomendio que como acto de caridad cristiana, donara una parte de su cuantiosa fortuna para la construcción de un hospital en el pueblo en donde había logrado a lo largo de los años alcanzar una muy buena posición social y económica.
Luego del encuentro con el párroco, Gomendio convocó a sus familiares, y entre palabras entrecortadas le manifestó su voluntad de donar $60.000 moneda corriente para la construcción del edificio hospitalario.
Dicho legado fue cumplido por su esposa María Aroza, y el hospital fue inaugurado el 25 de marzo de 1903.
En el momento de su inauguración contaba con un hermoso jardín, y habitaciones bien iluminadas y aireadas circundadas por un amplio corredor embaldosado. Además poseía: sala de autopsias, camas especiales de desarme para comodidad del operador, botica, espléndidos cuartos de baño, cocina económica, comedor de convalecientes, despensas, habitaciones y comedor independientes para las Hermanas de la Cruz que prestan sus servicios de administración en el establecimiento, y un cuarto de ropería para guardar y conservar la ropa de las personas que concurrían al nosocomio.
Actualmente posee una capacidad para cien pacientes, y habitaciones totalmente independientes y aisladas para enfermedades infectocontagiosas.
También en su interior existe una capilla asistida por las Hermanas de la Cruz, quienes a su vez, llevan adelante la organización y administración del hospital bajo la supervisión de la Madre Superiora. Dichas religiosas llegaron a Ramallo por obra del Mayor Castex, quien realizó las gestiones correspondientes sobre su instalación, ya que habían sido expulsadas de Francia.
Completando su obra benéfica la señora María Aroza de Gomendio dona a las Hermanas de la Cruz el edificio para el funcionamiento de un colegio. El establecimiento educativo llamado "San José" se encontraba en la actual calle Belgrano entre Gomendio y Avda. Mitre de Ramallo. Luego del fallecimiento de su esposo ella se radica en San Pedro, donde también realiza importantes obras de beneficencia.
Por todo lo expuesto, podemos decir que el Hospital José Maria Gomendio es una de las instituciones más emblemáticas de la Ciudad de Ramallo, y como toda institución perdurará y se afianzará a lo largo de los años con el esfuerzo de toda la comunidad.
El Hospital, hoy en día, cuenta con dos quirófanos en los cuales se realizan procedimientos en especialidades tales como: cirugía general, ginecología, obstetricia, urología y traumatología, con un promedio de 40 a 50 cirugías al mes. El servicio de anestesiología está conformado por los profesionales Dr. Sergio Condori, Dr. Nicolás Savoy y el Dr. Sebastián Chitarroni.
Además de todo lo mencionado Ramallo cuenta con una importante infraestructura orientada al turismo donde se puede practicar una gran variedad de actividades náuticas:
veleros, lanchas, kayaks, piraguas, motos de agua, pesca, windsurf y el esquí. El balneario Municipal es una extensa playa de arena extendida sobre el río Paraná que cuenta con servicios, parrillas, bares, estacionamiento, etc. A lo largo de su costanera se encuentra la nueva zona llamada Paseo "Viva el Río" en donde se puede disfrutar de diferentes paradores con restaurantes ubicados sobre la playa que permiten aprovechar lo que la naturaleza concedió a esta ciudad. Las ofertas de alojamiento en la actualidad incluyen además de diferentes hoteles, varios complejos de Cabañas ubicados en zonas estratégicas, y para los amantes de la vida al aire libre, la ciudad cuenta con complejos de cámping a orillas del río con todos los servicios necesarios.
Como para finalizar podemos concluir que esta localidad a pesar de su enorme crecimiento turístico tiene la suerte de poder conservar costumbres de pueblo y transmitir a las familias que la visitan la tranquilidad y la paz propias del interior bonaerense, a su vez la proximidad a los grandes centros urbanos del país le otorgan múltiples posibilidades a todos los ciudadanos que la eligen como lugar de residencia.
Anuario AANPBA, edición N° 3.
